Año: 2003
Revisada el 21 de febrero de 2005
6 Leatherman de 10
Sinopsis:
Unos estudiantes empiezan a recibir extrañas llamadas en las que se oyen a ellos mismos en el momento de su muerte.
Comentarios:
La joven Yumi (Kou Shibasaki) le dice a una amiga que le está sonando el móvil, pero la amiga le contesta que esa no es su sintonía. Al ir a ver la llamada perdida, ven que quien fuera que hubiese estado llamando ha dejado un mensaje en el buzón de voz. Aquí es cuendo la cosa se pone fea porque el mensaje tienen una fecha posterior al día en el que están y porque lo que oyen las deja heladas; es la voz de la amiga diciendo sus últimas palabras antes de morir. Tanto Yumi como la chica afectada se lo toman como una broma de mal gusto hasta cierto día, la fecha de la llamada, en que la amiga está hablando con Yumi por el móvil y repite las mismas palabras del mensaje de voz antes de soltar un alarido de muerte: “vaya, ahora se ha puesto a llover”.
Unos días después le toca el turno a otra compañera de Yumi, pero lo que recibe la pobre no es un mensaje de voz, sinó una imagen de sus últimos segundos de vida. He de decir que la película pintaba muy interesante hasta este momento, porque es aquí cuando aparece el culpable de todo: un fantasma azul con mucho pelo, ojos saltones y un serio problema de conducta. Otra vez la misma canción. A la decepción de ver al mismo fantasma de siempre (empiezo a creer que es la misma actriz) se le suma la decadencia del guión. Éste se vuelve casi estúpido de tan enrevesado, vaya, incluso la escena final resulta una auténtica paja mental. Supongo que esto se debe a que el director es Takashi Miike, el David Lynch japonés.
A pesar de todo, la película cuenta con escenas escabrosas muy eficaces, como el exorcismo televisado o el paseíto por el hospital abandonado. Los efectos especiales están muy cuidados y los actores no lo hacen mal, pero por favor, señores cineastas japoneses, ¿para cuándo un fantasma con el pelo corto y que camine sin arrastrarse?
Conclusión:
Una película con buenos sustos y un planteamiento inicial interesante, pero que podía haber ofrecido mucho más. Echadle un vistazo si no os importa ver por enésima vez una historia sobre un fantasma japonés cabreado.
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